lunes, 28 de marzo de 2016

Hasta que la muerte nos separe, prometo amarte como Haji amo a Saya en BLOOD+


Blood+. (ブラッド プラス). Es una serie de animación del año 2005. Contó con la nada despreciable cantidad de 50 capítulos y está inspirada en una película corta del año 2000 llamada Blood: The Last Vampire. 

Blood+ puede que te guste o no, pero esta claro que entre otras muchas cosas, hay algo que supo hacer muy bien: y es darle una proyección muy internacional a la obra, que acabaría dotándola de gran popularidad. A parte de por su temática de interés creciente entre el público general, lo vampírico, esto es sobre todo gracias al hecho de que la acción vaya sucediendo en diferentes escenarios mundiales, en especial varias icónicas ciudades como Hanoi, París, Londres, Nueva York, etc, que son perfectamente ambientadas. Los personajes no solamente son japoneses sino que cuenta con un surtido elenco de diferentes nacionalidades. Y sí, os podrá dar la sensación que de repente el japones se ha vuelto la lengua de habla mundial, pero salvando esto y que en los primeros capítulos la acción sucede en Okinawa, saben salir tan bien de Japón, que es bastante refrescante.
Por supuesto, la labor de Sony en su distribución mundial fue bastante acertada, a tal punto que ... aunque fuese en la 2 (TVE), la serie fue doblada y emitida en abierto, incluso en España (Aunque por Dios, os animo a que la veáis, como siempre, en versión original subtitulada....). 
De este modo, una obra, que no dista demasiado de otras series de animación japonesas, fue conocida por mucha más gente, incluido un público que no ve este tipo de arte. Si a esto le añadimos que la interesante historia contada se hace querer, entiendo la gran legión de devotos seguidores con los que la obra supo hacerse.

Blood+ nos narra la truculenta historia de Saya Otonashi.
Al comienzo de esta, Saya es una estudiante de preparatoria normal, que vive con su peculiar familia adoptiva en Okinawa. Tiene dos hermanastros, uno mayor que ella, Kai y otro menor, Riku. Como ella, son huérfanos adoptados por su padre, George Miyagusuku, un exmiembro del ejercito estadounidense que acabó arraigando en Okinawa
Bueno, en realidad la vida de Saya es algo peculiar. Para empezar debe recibir periódicamente transfusiones de sangre. Además sufre algún tipo de amnesia, por la que no recuerda en absoluto su pasado más allá de un año. Esto es, desde que comenzó a vivir con los Miyagusuku.
Esto, junto a las desconcertantes escenas iniciales de la guerra de Vietnam, ya nos anticipan que nada bueno o normal va a suceder. Y así acaba siendo.
Saya es atacada por un extraño monstruo hematófago, que en la serie posteriormente serán nombrados como quirópteros (vampiros, podríamos decir...). De este ataque es "salvada" por la intervención de un extranjero, llamado Haji, que le da a beber su sangre, le ofrece una espada y la insta a que luche. Presa de una súbita furia, con unos ojos encendidos en rojo sangre, veremos a Saya partir por la mitad al monstruo, el cual a los pocos segundos se cristaliza y muere.
Este suceso pone en marcha una cadena de acontecimientos, por los cuales, descubriremos que Saya es especial. Ella también es un quiróptero. El más especial de los quirópteros en realidad. Una misteriosa organización llamada Red Shield, respalda a su padre, velando por ella y con la intención de usarla como arma en una lucha global encubierta contra los quirópteros, pues su sangre es mortal para los mismos, siendo además prácticamente una de las pocas formas de matarlos. Haji también se revelará como su protector, pero en este caso motivado por el mero hecho de cumplir su voluntad y deseos, pues como veremos, es su siervo o Caballero, creado al beber la sangre de Saya en un pasado común.
De este modo, bailando al son de las pistas que el reguero de apariciones de quirópteros van dejando, Saya se verá arrastrada junto con sus dos hermanos a una lucha por todo el mundo de la mano de Red Shield, contra estos seres y sus creadores, sirviendo además de guía para ir desvelándonos el pasado de Saya, su naturaleza y la de sus enemigos.



Blood+ Es un relato más de la inevitable lucha entre humanos y vampiros. Una poderosa raza que se alimenta y multiplica usando a los humanos. Pese a su poder, debido a su inferioridad numérica, deben mantenerse en secreto y camuflarse en este mundo humano. Esto de por sí, es un buen motivo para ver la serie, por lo menos desde mi punto de vista, pues lo reconozco, el poder, carisma y oscuridad de estos seres de ficción suele ser magnético para mi. Pero no es algo que no hayan usado otras muchas historias.
En esta lucha contra los "vampiros" los humanos contarán con un arma secreta, una de ellos, que por diferentes motivos acabará luchando por el bando humano pese a su naturaleza. De nuevo, como el concepto anterior de la lucha contra los malvados vampiros, tampoco es un argumento innovador en series que tratan la temática vampírica.
Pero este anime va más allá. Blood+ sabe crear una historia original, basándose en su concepto propio y peculiar, acerca de la naturaleza y origen de los "vampiros" o como aquí los llaman, quirópterosSe abandona el cliché clásico de muerto viviente, mágico o sobrenatural. El quiróptero es un ser natural, una especie desconocida, a la cual tratan de darle una enrevesada explicación científica. Eso sí, con unas cualidades que lo hacen ciertamente un adversario formidable a ojos humanos. Me gustó mucho esta cosmología vampírica particular, como se crean estos seres, su génesis y como encaja la protagonista en todo esto. Que Además la serie juegue a revelar toda esta información de una manera gradual y progresiva hasta muy avanzada la misma, es, creo, toda una recompensa adicional, que da interés continuo a casi todos sus muchos capítulos, donde en cada cual encontramos una pieza más del complejo puzzle.



Veremos diferentes tipos de quirópteros, cuya forma, fisiología y poderes dependerán de su origen. Desde los que son meras bestias descerebradas pero mortíferas, al clásico vampiro caballeresco, pasando por toda una serie de subproductos como los Schiff o los Corpse Corps. Y en la cima de todos, (BIG SPOILER ALERT!!!), las dos reinas, de cuya sangre, nacen todos y cada uno de los restantes quirópteros.
De hecho, las caprichosas cualidades de la sangre de las reinas, es la base y origen de todo en esta serie. Me parece genial el concepto por el que todos los quirópteros, bien por voluntad de las reinas, bien artificialmente mediante experimentación humana con dicha sangre, se originen a partir de ellas. El quiróptero no es un subproducto de la alimentación de estos peculiares "vampiros", sino una víctima de una particular "infección", cuyos efectos dependerán de las circunstancias especiales en las que se exponga a la fuente de esa infección: la sangre de las reinas.
Pero si esto no era suficiente, la caprichosa característica por la cual la sangre de una de ellas es mortal para la otra, así como todas sus creaciones, es para mi el sumun argumental de la serie y la segunda de sus grandes originalidades. De este modo tenemos servido el genial antagonismo que es el núcleo del desarrollo de la obra: el conflicto entre Saya y Diva. Puesto que los quirópteros de casi cualquier estrato son muy duros de pelar (se supone que solo mediante la decapitación o incinerándolos hasta las cenizas se puede acabar con ellos), el hecho que el contacto con unas gotas de sangre de una reina sea mortal para toda la estirpe contraria, convierte en gigantesca amenaza y enemigo natural a dicha reina.
Pero la serie sabe complicarlo más aún, para que resulte más interesante si cabe, este conflicto y no una simple lucha del bien contra el mal. Hagamos que además, el fin último de esas reinas es asegurar la continuación natural de su especie, dando a luz la próxima generación de nuevas reinas. Hagamos que para que esta reproducción sea posible, el compañero con el cual deben copular no sea otro que un tipo de quiróptero especial creado por la voluntad de la reina contraria, uno de sus Caballeros. Así pues, son enemigos naturales, pero se necesitan.
Hagamos además que las reinas, como otras anteriores que pudo haber en un pasado no descrito en la serie, sean hermanas gemelas, hijas de la misma madre y concebidas en el mismo momento, añadiendo así el trágico apelativo de fraticida al conflicto.
Y por último, Hagamos que este particular momento de su nacimiento y las circunstancias en las que se dio, determine el destino, e incluso la polaridad de cada una de ellas y justifiquen no solo biológicamente su antagonismo, sino también moral y emocionalmente. 
Y es que la naturaleza quiróptera descrita en la serie, no es el único gran incentivo que encontré en el argumento de la misma. Otra de las cosas que te enamoran del anime es precisamente las diametralmente opuestas personalidades de ambas reinas y sus motivaciones
Fruto del capricho humano (lo que viene siendo un experimento científico), veremos como una de ellas es educada como humana, con afecto y normalidad, mientras que a la otra se la "abandona" y priva de toda atención y contacto, manteniéndola encerrada y dándole solo lo justo para su supervivencia . De este modo, una quiróptera criada como una humana, tendrá valores y motivaciones humanos, mientras que la otra, abandonada a sus propios instintos acabará gozando de la crueldad de una niña salvaje caprichosa, una villana de tomo y lomo que no tiene ninguna buena razón para no ostentar con orgullo y crudeza su naturaleza como depredador y poder.
El choque de sus valores es inevitable. Unas gotas de profundo arrepentimiento por liberar un mal que hasta entonces permanecía sellado y una fuerte dosis de venganza por las atrocidades cometidas por ese mal y ... voilà, aquí tenemos la receta de un resentimiento fraternal centenario que hace del conflicto entre Diva y nuestra heroína, algo irreconciliable y sabrosamente trágico.



Por ultimo, en cuanto a su trama vampírica, la serie recurre también a todo otro clásico, gracias al cual esto deja de ser un enfrentamiento del bien contra el mal, los humanos contra los vampiros y aparecen muchos tonos de grises y profundo interés a la serie: La implicación y responsabilidad de los propios humanos en la creación de los quirópteros artificiales. Sí, gracias a la mente maestra de uno de los 5 caballeros de Diva y el uso de su sangre como fuente para la experimentación. Pero son los intereses de un gobierno humano, los que llevan a la aparición de estos seres en un plan maestro para controlar el mundo mediante el miedo. Dos miembros de la mismísima Red Shield, acaban traicionando a sus compañeros, para proseguir sus investigaciones y ser reconocidos por ello. Es más podríamos afirmar rotundamente, que si Diva llega a ser la que vemos, es fruto de una crueldad humana sin parangón, al cosificarla como un sujeto de un experimento y privarla de todo filtro que la hubiese humanizado.
Así, no solo tendremos una vampiro que lucha contra los suyos para defender a los humanos, sino también humanos que se aprovechan y alían con vampiros, por sus propios intereses, haciendo gala de una maldad que va más allá incluso que los instintos predatorios de los quirópteros.

Blood+ es también una peculiar serie romántica. Peculiar porque olvidaos encontrar una historia chica conoce chico y todo va sobre ruedas, todo tendrá un marcado desenlace trágico. Al respecto de este tema, la única relación que queda más que clara y consumada es la atrocidad que comete Diva con el hermanastro menor de Saya y del resto no sabes muy bien como acabará la cosa. Bueno, miento, una pareja en la que se mascaba el feeling desde el comienzo (David & Julia), si tendrán un final feliz, a pesar de cierta vil traición. Así pues, veréis varias peculiares relaciones.
Me encanta la obsesión enfermiza de Karl (Caballero de Diva) por Saya. Se enamoro de la faceta suya que conoció en su enfrentamiento en la guerra de Vietnam, donde una Saya fuera de control impartía muerte y crueldad de forma totalmente indiscriminada. A pesar de desear su muerte, quiere verla en ese estado que el considera puro y hermoso y por ello no parará de buscar el enfrentamiento constante para llevarla a ese punto.
Las acciones y traición de Solomon, otro de los Caballeros de Diva, al enamorarse de Saya y fracasar en un arreglo pacífico, también fueron una grata sorpresa. En este caso, él si que amará de una forma sana a Saya, pero esta, lo rechaza por considerarlo un enemigo y sinceramente, tampoco está muy por la labor para noviazgos o procrear, con aquello de desear la muerte a su hermana y la suya propia. En cualquier caso Solomon acaba por convertirse en un personaje que se gana nuestra simpatía por la coherencia de sus acciones y sus sentimientos, deparándole el destino un trágico final, defendiendo a su amada, en la lucha contra sus antiguos aliados ... su propia "sangre". Nice!
Incluso los sentimientos de Kai por su hermanastra acabarán por ser sospechosamente algo más que fraternales. Esta claro que a este chico le mueve algo más que los lazos familiares y tiene profundos sentimientos por ella. Siempre ira detrás de Saya, siempre intentará protegerla (kawaii shounen...) y acabará por hacerle una propuesta cuando todo acabe, que nos deja más que claro porque da largas y evita a la pobre Mao, la chica de Okinawa, enamorada de Kai, que no duda en seguir su pista a lo largo de sus viajes, acabando por unirse a Red Shield por él.
Al final las cosas acaban como acaban y realmente nunca llegaremos a saber como de profundos eran esos sentimientos o si verdaderamente para Kai solo era su preciada familia...

Y por ultimo, la más importante, la relación entre Saya y Haji. Esta simplemente destila amor incondicional. De forma unidireccional, es verdad, pero como veremos, la devoción de Haji por su reina, no es algo que los instintos o el lazo de servidumbre que los ató como quirópteros pueda explicar. Simplemente el estuvo con ella desde prácticamente el principio, creció con ella, ha vivido su suerte y tragedia de primera mano constantemente y la ha protegido durante más de un siglo, luchando con ella codo con codo, ¿con la única pretensión de hacer realidad sus deseos?, No...como claramente nos es revelado en el último episodio, en la que ciertas palabras y una antigua promesa rota, derretirán a las espectadoras femeninas.
Incluso en el lado de Diva, sus Caballeros, de maneras un tanto retorcidas, en realidad la aman. Karl y James tienen comportamientos algo indisciplinados pero fogosos, de clara rebeldía, porque Diva de manera cruel les rechaza y actúan como lo haría un novio despechado. El equilibrado Solomon intenta desesperadamente acabar con el conflicto, atrapado entre su devoción por su madre y su incipiente amor por Saya. Un misterioso personaje, Nathan, supuestamente Caballero de Diva, pide a Saya que lo mate sin ofrecer resistencia cuando la primera ha muerto, pues según él no tiene razón para vivir. Su devoción y lucidez es tal que siempre verá entre los motivos ocultos del quinto y último caballero de Diva, Amshel, amenazándolo de forma clara en el caso que simplemente pretenda usar a Diva. Y este último, a pesar de ser un científico que ha vivido para estudiar a Diva y los quirópteros, siendo en última instancia el responsable de toda la creación artificial de los mismos, en realidad esta totalmente obsesionado por su reina, como bien podemos sobrentender cuando le recrimina a Saya que fruto de su inocente deseo "infantil", le privara del privilegio de ser el único que conocía y tenía contacto con Diva.



Y por si con todo esto no bastase, además la serie nos premia con constante acción y combates. Es verdad que quizá el apartado técnico y de animación no se lució demasiado a la hora de los mismos. Debo ser realista, no son unos combates memorables en ninguno de los casos y en muchos de ellos puedo recriminar muchas cosas que no me acaban de gustar, pero lo cierto es que gracias a ellos, tenemos las dosis de entretenimiento magistralmente dosificadas para diluir tanta trama y densidad argumental .... y que narices, al final esta historia lo es de un enfrentamiento, con lo que los correspondientes combates en que esa enemistad se hace realidad, son anhelados por el público, sedientos de ver como son resueltas las diferencias.
Dije que no hay combates memorables en esta serie ... bueno, mentí. Si bien no los recordaré por su técnica o animación, tres de ellos me parecieron la gran genialidad, más por su dramatismo y crueldad que por otra cosa: La primera de estas escenas no es ni mas, ni menos, que la gran secuencia inicial con la que abre la serie. Su particular modo de mostrar las imágenes como si fueran un sueño o un recuerdo lejano, esa oscuridad que hace resaltar la sangre y los ojos encendidos de la asesina y la crueldad, son muy impactantes. Los dos siguientes enfrentamientos que tampoco olvidaré son dos de los momentos estelares de la serie protagonizados por Diva y Riku y los fútiles intentos de salvar a este, del voraz capricho de una Diva, en su cenit desbordante de crueldad y deseo. La escena en la torre donde esta se alimenta por primera vez de Riku, es todo un clásico de las historias de vampiros. Pero la tercera escena, donde Diva y uno solo de sus caballeros encabezan un ataque directo al barco de Red Shield, simplemente me dejo sin palabras. Ver a Diva haciendo gala de su crueldad jugueteando con los hombres de negro de Red Shield, ostentando su caprichosa naturaleza al robar unas zapatillas de deporte y sobre todo cometiendo la atrocidad que era su objetivo último, me dejo impactado y boquiabierto. 
Es una escena, en la que realmente no se ve nada. Apenas un plano de los pies de Diva y sus zapatillas, en el que vemos caer al suelo su ropa y un posterior plano de la mitad superior del cuerpo de Riku, tirado en el suelo, cristalizado y desnudo ... nos sugiere la tropelía, al más puro estilo viuda negra, o mantis religiosa, que acaba de cometer. Os aseguro una cosa, tras ver esa escena, esos profundos ojazos azules empezaron a inspirarme verdadero desasosiego.

No podría afirmar que es una serie gore, no bajo mi permisivo punto de vista. Es verdad que sangre, la hay a mares. Estamos hablando de una serie de vampiros, que el rojo sangre resalte en la pantalla es hasta romántico. Tampoco se cortan un pelo en las escenas de acción para mostrarnos amputaciones de miembros, decapitaciones o enemigos partidos por la mitad. Pero de nuevo es más una ostentación de sangre que de víscera, siendo incapaz realmente de recordar ningún bizarro destripamiento que realmente me haga considerarla una serie gore. Aun con todo esto, estad preparados para recibir una buena dosis de violencia explícita.



Una serie con tantos capítulos, densidad argumental y situaciones que ponen a sus personajes en el límite, nos premia, como era de esperar con muy buenos de estos, en especial sus protagonistas principales. No, no me estoy refiriendo a Saya y Haji, o Saya y Kai. Me refiero a las dos hermanas, Saya y Diva, las auténticas estrellas de este show. El resto, bailan al son de ellas.
Saya es una heroína trágica, movida por el arrepentimiento y la venganza. Y alguno dirá .... bueno, no es nada del otro jueves, nada que no nos hayan contado ya.
Las bondades de la serie, consisten en que este rol lo va adoptando a lo largo de la misma, conforme va conociendo, o mejor dicho, recordando, su papel en la historia. No es que no fuese así antes, pero el reseteo de su memoria con el que inicia la narración de la serie, la deja en el punto cero de su viaje hacia esa determinación, ideal para que lo vayamos redescubriendo con ella.
Por esto, juega un papel decisivo su amnesia, que ella misma se cree una humana normal, con sus valores y sobre todo los diferentes momentos trágicos presentes que irán sucediendo, que van revalorizando esta determinación olvidada. Así en la serie, Saya tendrá un proceso de maduración constante desde una indecisa y atemorizada joven adolescente, a la dura y determinada herramienta de muerte de los suyos que debe ser.
Los miedos y sufrimientos con los que esta chica nos deleitará, no se deberán a tener que combatir mortíferos monstruos. Estos los perderá en cuanto asuma su propia naturaleza y sepa de su poder. Su alma será torturada gracias al conflicto entre sus valores, recuerdos y afectos humanos, por un lado, frente a la responsabilidad que ella misma cree tener en los diferentes sucesos acaecidos y su propia naturaleza asesina de quiróptero, capaz de atroces monstruosidades, por el otro.
Como ella misma acaba concluyendo: la mera existencia de la sangre maldita de su hermana y suya propia es tan potencialmente peligrosa para sus seres queridos y el resto de la humanidad, que simplemente no debería existir. Y hará propia la responsabilidad de su erradicación, intentando además llevar esa carga sola, con el fin de evitar ver sufrir o morir a más personas, de las que ya lo han hecho.
Si ella misma cree esto, podréis imaginar que a pesar de una hipotética victoria en su lucha, lo más seguro es que no haya un final feliz en esta historia. Adictos a la tragedia .... tenéis servido un personaje que os deleitará.
Que Saya sea un personaje femenino además la dan ese valor "adorable". Simplemente te será imposible no conmoverte con su historia. La serie podría haber optado por una ostentación erótica de la protagonista y no es el caso. Creo que son bastante serios con su exhibición, optando siempre más por cierta elegancia y recato en los escasos desnudos que veremos y algunas otras escenas que en realidad forman parte de ese romanticismo y por que no, erotismo, de muchas historias vampíricas.



Diva es grande, Diva es hermosa, Diva es aterradora. De no ser por su aspecto humano, lo más parecido que podéis encontrar a ella es una Reina de Alien. Un mortal y poderoso depredador, carente de toda empatía, que coge lo que necesita, cuando lo necesita y cuya motivación última, que curiosamente la acercan a sentimientos algo humanos, será su instinto maternal. Y sí,  pese a la vileza que ostenta, propia del más desalmado de los psicópatas de libro, no puedo parar de sentir cierta lastima por su final y cruel destino. La historia en cierto modo lanza un mensaje muy claro al respecto de la maldad: Ella es lo que es por ser una víctima a su vez de la maldad del ser humano. Algo que pudo ser humano, de haberse moldeado (como es el caso de Saya), al final es un depredador asesino porque nadie le enseño a comportarse de otro modo y simplemente sigue los instintos de su propia raza, instintos que no son muy diferentes de los humanos.
Por todo este conjunto de razones, para mi Diva es uno de los villanos más logrados de la historia. Un personaje avocado a hacer el mal con crueldad y sin remordimientos, pero totalmente justificada a ojos de los espectadores, tanto que hasta la comprenderéis y apreciaréis, al tiempo que deleita vuestra vista y oídos.
Su historia con Saya es además muy estimulante. Primero por el parentesco. Pero sobre todo porque Diva es el origen de toda tragedia de su hermana, no solo por la masacre protagonizada en el Zoológico, o ser directa o indirectamente responsable de la muerte de sus nuevos seres queridos. Para Saya, Diva es la prueba viviente de que su especie no debe existir. Que su sangre maldita es un pecado en este mundo.
Yo no podría decir que Diva albergue un especial resentimiento por Saya, de hecho creo que ella esta más allá de todo sentimiento, incluido el odio. Que sea su hermana incluso creo que la hace algo como estimada o cercana para ella. Pero ante todo, Diva es práctica. Coge de su hermana lo que necesita y en cualquier caso, su muerte le reporta un gran beneficio, al desaparecer el medio más fácil con el que acabar con su vida.

Haji es un personaje que al principio de la serie no me convenció demasiado. No discuto para nada su estética y estilo, estos me encantaron para una serie de esta temática. Pero su papel en la mayoría de los casos se me antojaba extraño y repetitivo, algo similar al de Tuxedo Mask de Sailoor Moon. El héroe galán que aparece en el momento crítico del combate da un golpe y deja el resto a la heroína a la que ha asistido con las correspondientes palabras de animo. Con escasas líneas, no es hasta que nos cuentan su pasado y han transcurrido bastantes capítulos, que le cogí el gusto. Sus últimas palabras y acciones, así como una rosa en el lugar de descanso de Saya, salvan in extremis a este personaje, dotándole de ese valor de héroe romántico trágico, totalmente dedicado y por ello apetecible.

Mucho más podría seguir hablando de la autentica legión de personajes que aparecen en la historia, orbitando alrededor de estas protagonistas y su historia. Casi todos ellos, en especial los que sobreviven, son mimados con su correspondiente maduración y cambios a los largo de los 50 largos capítulos, dejando una grata sensación de profundidad y realismo. Incluso entre los "villanos" habrá algunas muy gratas sorpresas, como el caso de Solomon, o los Schiff.
De entre ellos rescataré de manera particular a Kai, un personaje que durante mucho tiempo me hizo dudar sobre quien llevaba el coprotagonismo de la serie, ya que estaba presente en casi todos los eventos presentes de la lucha y llega a tener una especial importancia, sobre todo a en la segunda mitad de la serie, donde abandona su faceta insoportable de adolescente algo absurdo y se vuelve un curtido soldado que además acaba siendo el ancla de la humanidad de una Saya al limite.
Procurad no encariñaros mucho al principio con ningún personaje, porque las bajas serán abundantes y es que como serie que se ceba en el destino trágico y el enfrentamiento, asume la naturalidad de las bajas, sobre todo para que os conmováis con el dolor de los que se quedan y compartáis su ansia de venganza, subiendo progresivamente el tono e intensidad del conflicto.

En cuanto a lo negativo mencionar algunas cuestiones. Durante un tiempo, no entendí a varios de sus personajes, que se me antojaban algo clichés y sin demasiado sentido en la historia, como eran Riku y Nathan
Del primero, me resultaba demasiado incomprensible como un chaval de escasa edad era arrastrado a participar en semejantes aventuras, sin en realidad poder hacer nada, la clásica pet con el objetivo de enardecer los buenos sentimientos. Al final, viendo el papel que la serie le tenia reservado, pude entender su función y, aunque caprichosa, me encantó el destino que la mente o mentes de los guionistas tenían reservado para él, al menos en el anime.
Del segundo, hay que decir que en realidad tiene un escaso protagonismo en la serie, estando prácticamente de miranda en la misma. El malvado caprichosos con sus propias y ocultas ambiciones al que incluso el villano por excelencia, Amshel, respeta. Pero es verdad que la historia, al final, le da ciertos momentos, que lo envuelven en misterio y revalorizan al personaje. Una suerte de encarnación del "continuará", muy sutil. Hay toda una serie de teorías sobre este personaje y si por algún motivo apareciese un Blood+ segunda parte, contando las andanzas de las nuevas reinas a buen seguro el tendría un papel importante.

Un segundo aspecto que no me apasionó demasiado de la serie es la estética del aspecto monstruoso de los quirópteros, en especial los comunes. Parecen torpes  y toscos osos hormigueros mutantes. Que pena que se abandonara el rumbo marcado por su inspiración (Blood: The Last Vampire), donde estos monstruos si estaban bastante bien. Incluso la transformaciones de los Caballeros, tampoco es que sean geniales que se diga, algunas de ellas (como la de Amshel), un tanto decepcionantes. Al final, una hermosa mujer de encendidos ojos azules y rostro manchado en sangre es el más terrorífico y logrado vampiro que vamos a ver.


Otra cuestión que me disgustó, es esa manía que tienen muchas series de animación japonesa de dejar como auténticos inútiles a todo el mundo menos al protagonista principal. Y es que en realidad nadie de Red Shield (si la memoria no me falla), llega a acabar con quiróptero alguno. Solo Saya los destruye.
Si la decapitación o incineración son las formas de alcanzar ese objetivo, ¿no hubiese sido más lógico usar otro tipo de armas y finalmente destruir algún enemigo?. Vale, los reflejos y la fuerza de estos seres son abrumadores, de acuerdo, pero el número y la tecnología debería haber supuesto un punto a favor del bando humano y salvo en lo tocante a crear quirópteros que puedan ser usados como armas controladas (los  Corpse Corps) y dos bombardeos puntuales, los humanos se limitan a usar armas de fuego que a lo sumo retrasa unos segundos a estas bestias ... el resto, parece depender 100% de Saya.

Tampoco queda muy clara en la serie cual es el nivel y habilidades de Saya. En muchas ocasiones te parecerá que solo es una colegiala que ha cogido una espada, para nada a la altura de la  fuerza y habilidad de sus congéneres. Esto te deja con una contradictoria sensación de frustrante inutilidad en algunos combates, frente a exorbitante poder en otros, de los que además dependen de manera caprichosa los acontecimientos.
Si es cierto, que esto tiene que ver con ese tormentoso proceso por el cual veremos evolucionar a Saya de inocente chica, a asesina resignada. Creo que pese a la importancia que tiene Saya como personaje, de la que depende todo, en realidad hacerlo de este modo, no nos deja con la ofensiva sensación de "puto amo" que tanto detesto en los protagonistas, haciéndola alguien que realmente necesita que la ayuden, a pesar de no querer que lo hagan.

Finalmente las motivaciones de algunos de los Caballeros de Diva, tampoco es que sean el referente de los motivos villanos. Karl es poco más que un psicópata obsesionado, James un perrito faldero con complejo de dóberman, y Amshel, una suerte de científico cruel que vilipendia a la humanidad. El supuesto plan maestro de este último, si pretendía ser un medio por el cual ganar poder, prestigio y dinero, dotando de un sistema de control mundial, en su ejecución en el teatro de la opera de Nueva York, no parece la mejor de las maneras de ponerlo en practica al tocarle los cojones a su cliente.

Que el canto de Diva provoque la mutación de humano a Quiróptero a aquellos infectados por Delta 67, no me pareció un buen acierto para tratar de dar a los quirópteros un aspecto de especie natural con una contundente explicación científica, como en principio se pretende.  Se me antoja más un caprichoso retorno a las cuestiones "mágicas" de la naturaleza de vampiros mostrados en otras series. Reconozco que dotar a Diva de un talento artístico hermoso, fomenta un contraste muy atractivo en esta villana, que la hace más adorable si cabe. Pero este peculiar funcionamiento de la mutación, junto con un extraño plan, algo sin sentido, hacen que los acontecimientos finales, objetivo último de la mente maestra Amshel, parezcan más un capricho, una especie de extraño y poco coherente experimento con el que se pretende ver "que pasa".



Y aunque su animación tampoco es de mi total gusto y agrado, apenas he de reprocharle casi nada, al contrario, pese a su calidad promedio se precia de muchas imágenes y escenas muy bellas.
Con una estética entre el realismo y el shoujo, el factor moe desaparece prácticamente. Al contrario que otras animaciones, los labios por ejemplo aparecen bien perfilados, en especial en ellas y los ojos tienen un tamaño que se acerca peligrosamente al normal (sin llegar a conseguirlo, afortunadamente).
No diría que es un estilo de animación que me haya llamado la atención, pero tampoco me molesta y su realismo en realidad es bastante adecuado para la historia.
Sus abundantes tomas en escenarios oscuros, unas imágenes que a veces parecen estar entre niebla y un correcto uso de la luz, son bastante acertados para una serie que trata de contarnos una historia de "los hijos de la noche". Encuentro cosas que me gustaron mucho, como esas escenas iniciales de Vietnam, o los encendidos ojos de ambas reinas. En general el diseño de personajes de ambas protagonistas acaba siendo un acierto, en especial Diva. Incluso Haji es un personaje estéticamente muy apetecible.
Como bien comenté, no es una serie que os va a deleitar por su acción. La hay en abundancia, pero su técnica de animación no consiguió ser sobresaliente, simplemente una serie correcta para su época, donde humanos normales anónimos y los más básicos de los quirópteros suelen ser una mera carne de cañón a masacrar. Las luchas con los Schiff y los caballeros de Diva si tendrán algo más de miga, pero es una pena que siguiendo la tónica general de la serie, el combate final entre las dos hermanas no hubiese sido más espectacular de lo que realmente fue, destacando solo por el dramatismo y la partitura musical y no por la técnica o el espectáculo.



En lo que sí hubo gran acierto en esta serie, fue en su banda sonora. No podría ser de otra manera, pues sorprendentemente fue compuesta por Mark Mancina y producida por Hans Zimmer, uno de esos reyes Midas de Hollywood que convierte en oro todo lo que tocan.
Y Oro hay mucho en esta magnifica banda sonora, de la que destaco dos temas estelares, necesarios para vuestra discografía. El primero de ellos es "Diva", el temazo de esta banda sonora, tanto en su versión instrumental como sobre todo cantada. Es la canción con la que nos es mostrado el talento musical de Diva, la canción que resuena en la mente de todo quiróptero y sin explicación aparente, en la de Riku. La canción con la que los humanos expuestos al Delta 67 mutan. Y sí, puede que se abuse quizá demasiado en su uso a lo largo de toda la serie (yo la hubiese limitado al enfrentamiento final), pero en cualquier caso es un gustazo oírla.
El otro imprescindible de esta banda sonora es "Blood+ Grand Theme", una canción con dos partes. La primera parte es el más puro representante de ese epiquísmo Hollywoodiense, que sus creadores supieron imprimir. Música de batalla que te hace estremecer. Su segunda parte, una conmovedora y triste melodía. En definitiva, ¡esta canción viene a ser el resumen perfecto de esta historia de lucha y tragedia!
Más de 40 temas adicionales completan esta extensa banda sonora, una mezcla de temas sinfónicos mezclados con elementos electrónicos (al más puro estilo de sus creadores), junto con algunas piezas de música clásica, que vendrían a ser los temas interpretados al chelo por Haji en la serie.
Entre las canciones destaco algunas más épicos o de batalla, como "Saya´s Victory", "Blood+ The Final Battle", "Saya´s Battle Theme", o "Diva´s Awakens", tan parecida a la versión instrumental de "Diva", que a veces parecen la misma canción.
Las muchas canciones tristes, suelen ser una versión o variación de la misma melodía, entre ellas están "Saya´s Destiny", "Saya´s Fear", "Saya´s Courage" y "Sayas Lonliness". "Saya´s Love" es otro de esos tristes temas creados para reventarnos el lacrimal, que como los anteriores, amenizan esos momentos trágicos álgidos.
Por ultimo también hay algunos buenos temas para los momento tétricos, como son "The Vampires´ Threat" o "The vampires´ Conspiracy"
Sus diferentes 4 endings y 4 openings con los que cuenta la serie no fueron cosecha del dúo Mancina/Zimmer, sino de diferentes grupos J-pop o cantantes solistas. A pesar de ser apetecibles temas, eclipsados por el resto de la banda sonora, pueden llegar a pasar algo desapercibidos. Sin embargo, no os perdáis detalle de las canciones "Season´s Call", "Color´s of the Heart" y sobre todo "Aozora no Namida", tres de los openings bastante buenos y potentes.
En general no solo la música de los op. o end. es decente, sino que son acompañadas con imágenes, algunas con un arte y colorido especial y original, que merece la pena al menos las disfrutéis un par de veces.



¿Es Blood+ un buen anime? Yo opino que sí. Ofrece un argumento denso, pero sabiamente desentramado, para que se haga entretenido e incluso interesante. Encuentra su propia originalidad dentro de las muchas historias de vampiros, centrando el origen y naturaleza de estos entorno a dos hermanas, dos enemigas naturales, que resuelven su conflicto a lo largo de la serie, personificando una suerte de lucha del bien contra el mal, de lo humano contra lo monstruoso, en la que realmente hay muchas tonalidades de grises y sorpresas, siendo algunos quirópteros los que gozan de más humanidad que muchos humanos, y ciertos humanos los que se comportan como el más vil de los monstruos quirópteros.
Su protagonista femenina, Saya, ciertamente goza de una gran carisma, encanto y desarrollo, pero es respaldada en la historia con la que podría ser de las mejores némesis que he visto en el anime, Diva, así como un seguidor y amante devoto, Haji. En conjunto tejen una gran tragedia para disfrute de todos aquellos que se deleitan del triunfo del bien pero no sin un alto coste para los héroes.
Múltiples historias de amor, casi todas frustradas, mucha acción, sangre y una excelente banda sonora, completan los incentivos. Sí, posiblemente en cuanto a su animación, técnica o aspecto visual no puede decirse que es una serie que destaque, pero tampoco es desafortunada. Por último, se hace muy adictiva y llevadera, pese a la densidad y su número elevado de capítulos, si la comparamos con otras historias cortas de 12 o 24 capítulos.
Recomiendo esta serie a cualquier enamorado del romanticismo vampírico. Con cierto gusto reciclado, explora muchos de los tópicos de estas historias, pero dándoles un look original y moderno. En cualquier caso, aquellos que gustáis de acción, momentos épicos y tragedia, la serie sabe recompensaros y también será de vuestro agrado. No obstante, Blood+ tiene esa magia que algunos culebrones saben tener. Si te sumerges en ella, en las relaciones entre sus muchos personajes, aun no cumpliendo los perfiles anteriores, es muy probable que acabes atrapado por la historia de una heroína, Saya, que engancha, en especial por lo sorprendente de algunos giros. Por esta razón, creo que es del gusto general y para sorpresa de muchos, puede ser una buena serie para iniciarse en esto del anime, siempre y cuando la temática algo oscura no os eche para atrás.
Podría resumir que sin ser un gran show visual, Blood+ es una serie que te gana por su historia y por este conjunto de razones, sin ser una serie perfecta, es digna merecedora de un 8.8. Esta nota, espero que sea fiel reflejo de una serie que aunque no me atrajo en su inicio, pese al gancho vampírico, si supo conquistarme con su desarrollo. Mi adicción por ver dicha serie fue tal, que devoré sus 50 capítulos en apenas dos días, declarándome oficialmente uno más de los muchos fans por todo el mundo, con los que la serie supo hacerse.

Si os gusto Blood+, no os perdáis Blood: The Last Vampire, aunque sea por la curiosidad por ver la breve película en la que esta serie se inspiró, y porque no, su peculiar arte. Decir que también deberíais ver Blood-C y Blood-C: The Last Dark, sería faltar a la verdad, pues en realidad son historias que no tienen mucho que ver. Puede que las protagonistas se hagan llamar igual, sean chicas especiales avocadas a luchar contra un enemigo devorador de humanos y cuando lo hacen sus ojos se tornen rojo carmesí empuñando una espada, pero hasta ahí las similitudes. Mientras que Blood+ es una suerte de madura tragedia romántica, Blood-C es una serie gore algo repetitiva, con revelación final. 




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