¿Cielo, te cuento un cuento? OOKAMI SHOUJO TO KURO OUJI

Ookami shoujo to Kuro Ouji. Más popularmente conocido por su título en inglés "Wolf girl and black Prince" , lo que podríamos traducir  como "La chica del lobo y el Príncipe Negro". Y como su título nos adelanta, en la serie tendremos una chica que se dedica a mentir como el pastorcito del cuento y un genial y bello chico un tanto retorcido. La historia se basa en un manga del mismo título del año 2011 y la versión anime fue lanzada en el 2014 contando con 12 episodios + 1 OVA.

Amantes del Shoujo tendréis más de lo mismo. Gente que no os gusta este genero, evitad esta historia.

La serie nos habla de una chica Erika Shinohara que comienza la preparatoria en un nuevo instituto. Su principal preocupación en este momento es hacer amigos y que su nueva vida escolar no sea un infierno de ostracismo. Por esta razón no tiene ningún reparo en inventarse una historia acerca de que tiene un novio, que en realidad es falsa, con el fin de ponerse a hablar con dos de sus compañeras que claramente hacen ostentación de sus respectivas parejas.

De ese modo consigue entablar una relación con ambas, cayendo una dinámica continua de mentiras acerca de su supuesto novio. Sin embargo ambas amigas comenzarán a sospechar de ella, porque nunca ven a su novio, nunca ven fotos del mismo, etcétera. Con el fin de aplacar estas sospechas, Erika tomará una foto de un chico en la calle, que le llama la atención por su especial atractivo y presentará a dicho chico de la foto, a sus amigas, como su novio. Su sorpresa, para su desgracia, sera que ese chico va a su mismo instituto, su nombre es Kyuoya Sata, apodado el príncipe y pronto será reconocido por una de las amigas, forzando a Erika a tomar medidas desesperadas.

En secreto le pide a Kyouya que le ayude fingiendo que es su novio. Inicialmente, Kyouya accede a su petición amablemente, pero a los escasos minutos, irrumpe la verdadera cara de este, y le dice que si quiere que finja qué son novios ella a cambio deberá ser su perro, su mascota, ya que en español lo de perra suena muy fuerte, pero hace referencia a que ella debe ser su sumisa mascota y el su amo. Algo más basado en esa típica relación del Japón feudal, del Sama y el sirviente.... Y no una connotación sexual como os podéis estar imaginando, ¡guarros!.

A pesar de que inicialmente lo rechaza, tras tres o cuatro líneas de conversación y extorsionada por las amenazas de revelar la verdad, Erika finalmente se somete. Así comienza una extraña relación, muy divertida inicialmente, en la cual, en privado, Kyouya no para de mandarle tareas, tratarla de una forma algo sádica, recordarla siempre que es su perro, mientras él finge en público que es su encantador novio. Dando lugar a algunas situaciones cómicas que son en realidad casi  todo el escaso filón de la serie.

Y como esta chica es masoquista, en el transcurso de esta relación ella acabará dándose cuenta que está enamorada de él, pasando  a experimentar unos profundos sentimientos amor odio, ya que inicialmente a pesar de que Kyouya muestra cierto acercamiento a ella (siente celos cuando se le acercan otros chicos, o la defiende cuando algunos otros la agreden) en realidad la rechaza y el hecho de que sepa que está enamorada de él, incluso incrementa el sadismo en su trato a Erika.

Como os comentaba al principio, es este anime de 12 capítulos, una obra de la cual os debéis de abstenerse profundamente si no os gusta el shoujo: es un prototipo del mismo, además un prototipo moderno, en el cual ahora gustan los chicos guapos y populares, pero con un retorcido oscuro pasado o secreto y las chicas protagonistas que se caracterizan sobre todo por su normalidad: una chica del montón, vamos, como puede ser cualquiera de las que ven estas obras, para que así se sientan identificadas. No me malinterpretéis, las personas normales del montón, entre las que me encuentro, necesitamos actividades de ocio en las cuales nos podamos sentir identificados y disfrutar así mas de las mismas. Pero es verdad que el shoujo moderno con frecuencia toma una ruta demasiado cliché a este respecto con chicos demasiado tío buenos, fantasía de cualquier chica, que te dejan sin palabras, incluso aliento y chicas normales, que de repente al azar y por circunstancias totalmente random, son incluídas en el encantador y bello mundo de estos príncipes y teletransportadas así a una romántica historia única y sublime.
Por supuesto no es una tendencia única en  el mundo del anime. Productos como Crepúsculo, o 50 sombras de Grey son un claro referente de este cine. Es normal, un incipiente público joven y femenino se alza y clama productos para ellas, adaptadas a los nuevos tiempos.

Y de la misma manera que existen shounen y seinen buenos y buenas obras, hay shoujos que son buenas obras, pero, en mi humilde opinión, no es el caso de este anime... Quedándose en el mero cliché del shoujo moderno.

La historia arranca con una comedia bastante interesante, una situación divertida y graciosa pero pronto se queda en nada.

El interés de la serie se dará de golpes continuamente con la actitud de su protagonista masculino: sí, ya hemos entendido que eres un chico frío, retorcido, al cual no le gustan las cosas típicas, las novias típicas, las fiestas y las multitudes, las navidades y los cumpleaños, vale... Ya nos hemos enterado que por alguna razón eres un amargado. Esto en vez de conseguir convertirse en el factor que de interés a la serie, a la relación, al final hace que dicha relación se convierta en una repetitiva liturgia en la cual Erika-sumisa, enamorada hasta las trancas de este sujeto no para de intentar acercarse a él, hacerle gracia y tener una relación "normal" y él de forma sistemática, cómo odia esta normalidad, se niega a hacerlo inicialmente, aunque finalmente a regañadientes y como si le estuviera haciendo un favor, acaba accediendo a alguna de estas peticiones... Pues en fin, de vez en cuando hay que darle un hueso al perro.

Por supuesto que en el fondo, muy en el fondo se supone que él está enamorado de ella...a su extraña manera y eso es lo que justifica esa tendencia continua masoquista de la protagonista.

En mi opinión intentaron hacer una comedia  romántica basada en una relación amor odio y no les salió ni remotamente parecida a Kaichou wa maid-sama.

Él porque está claro Erika a pesar de ser una chica simpática, con la que nos reiremos mogollón, muy alegre... muestra una faceta sumisa qué a mucha gente, entre los que me incluyo, me encrespa un poco. Básicamente no le vemos ese contrapunto de personalidad fuerte que de interés y realismo a esta extraña relación romántica. Básicamente se echó de menos uno de esos bellos momentos Nanami Bokura Ga Ita, llamando idiota, estúpido, subnormal,  hijo de puta, a la cara a su enamorado, por cretino y creído. Por otro lado la rareza del maravilloso y fantástico chico protagonista, es un hastío social camuflado, que en realidad se hace bastante más insoportable qué interesante. En resumen, a mi gusto, pese a tener todo lo bueno de un prometedor héroe shoujo (guapo, atractivo, un diseño de personaje juvenil y con estilo, un atractivo doblaje a manos de un experimentado seiyuu, Takahiro Sakurai, una personalidad magnética que prometía un contrapunto vil), a pesar de todo esto, acaba perdiendo todo su carisma. Lo único que podremos llegar a esperar de él, es que fruto del gran amor por la protagonista femenina, esta le cambie y deje de ser tan plasta ... vamos la architípica fantasía femenina.

Y a pesar de todo esto que os cuento....sorprendentemente es una serie que me ha mantenido bastante entretenido y no se muy bien porque...

Erika pese a sus pesares, me parece muy graciosa, esa mezcla de algo descerebrada y buena chica, te llega a gustar.

Kyouka, le pega una agradable patada inicial al clásico cliche del anime shoujo mostrando esa vena "sádica".... a pesar de que luego, se transforme en algo encrespante, pues no es sadismo, que sería lo deseable, simplemente hastío y manías.

Alabo su dibujo. Sin ser la releche, su estetica de personajes a lo Kamisama Hajimemashita me encanta y hacen que los personajes me gusten. Que queréis que os diga, el shoujo en general me gusta y su estética me atrae. Al ser un shoujo en cuanto a recursos de animación necesitamos poco más, adorables personajes femeninas con expresivos rostros y atractivos y misteriosos chicos que las hagan perder la cabeza.

¿Es Ookami shoujo to Kuro Ouji un buen anime?. Un buen resumen de esta obra seria la de ser un shoujo bastante común (común no es sinónimo de malo, pero sí de poco original) y a veces exasperante, pero que sorprendentemente te divierte y engancha. Con estos preceptos la considero una obra muy apetecible, pero que aporta poco, o más de lo mismo.

Otorgo un 6,8 a esta obra. Ojala se hubiese centrado mas en profundizar en el sadismo de Kyouya...para que así hubiese parecido un interesante, pero enfermo y justificado personaje y no un cargante aburrido, que simplemente encuentra en Erika una fuente de aligerar su hastío.
Termino esta breve opinión, deseándoos lo mejor. Gracias por vuestra lectura y os animo a que os acerquéis a otra obra, en el caso que esta haya sido de vuestro agrado. Me refiero a Ao Haru Ride. Sus similitudes son sorprendentes. Estimo que si visteis una de ellas y os gusto, la otra os encantará igualmente.