jueves, 17 de marzo de 2016

"Amor, eres nyancantadora", "Tu si que sabes decirme cosas ACCHI KOCCHI"


Acchi Kocchi. (  あっちこっち, Place to Place en ingles, algo así como Por todas partes, en castellano). Es una serie animada de 12 capítulos + 1 OVA, emitida en 2012. Está basada en un manga cuya publicación comenzó en el 2006.

Tsumiki Miniwa es una estudiante de instituto enamorada de su compañero y amigo Io Otonashi. No podríamos decir que Io se muestre enamorado de ella, pero lo que sí esta claro es que probablemente ella sea su amiga más cercana. No obstante, el uno por el otro, no van a hacer mucho por avanzar. Tsumiki es ciertamente tímida y algo introvertida. Pierde el control cuando sus sentimientos son expuestos, por lo que le cuesta ser sincera en publico, negándolo constantemente, a pesar de lo evidente que es para sus tres amigos (Mayoi, Hime y Sakaki). Por su parte, Io no se da cuenta de lo que siente por él Tsumiki, ya que pese a ser un genio para casi todo, es muy despistado con los contextos (que oportuno .....). Y como en realidad la aprecia y Tsumiki es jodidamente adorable, no para de ponerla en situaciones al limite para su kokoro, acariciándola como a un gatito y hablándola en un tono afectuoso, responsable de cientos de hemorragias nasales, de Tsumiki y su amiga moe-adict, Hime
A lo largo de la serie veremos la relación entre estos dos personajes, así como con sus divertidos amigos, cada cual más cómico, mientras protagonizan los diferentes eventos clásicos, de su vida escolar, a su peculiar manera.



Acchi Kocchi es una comedia romántica, que nos trae de nuevo el formato de las historias cortas, para narrarnos las vivencias de Tsumiki y compañía. Si es verdad que por lo general, cada capítulo suele respetar que haya una temática general, un evento, que suele ser el contexto en el que nos son contados a modo de skech las varias historias cortas en el mismo. 
De este modo, nos encontramos con otra de esas series que realmente no cuenta una historia al uso, sino más bien un compendio de las cómicas situaciones de la vida normal de estos personajes, respetando en este caso cierta linealidad basada en el orden cronológico de los diferentes eventos escolares y las estaciones.
Diría que no soy fan de estas historias slice of life, compendio de minihistorias, y que prefiero mil veces los animes que me cuentan una concreta y definida, pero encantadoras series como Minami-ke o Natsume yuujinchou ya me demostraron que a veces, puede haber joyitas en este tipo de formulas, bien sea de historias cortas o capítulos autoconclusivos, que con el tiempo y muchos capítulos, si crean un contexto en el que se trabaja la historia de los personajes centrales.
En cualquier caso, si es verdad que la impresión final que te suelen dejar la mayoría de ellas, suele ser la de serie para pasar el rato...nunca de serie que te impacta. Simplemente es muy complicado que todas las historias, de cada uno de sus capítulos autoconclusivos o las historias cortas mantengan un grado de calidad elevado u original y por lo tanto algunos capítulos se hacen aburridos, totalmente prescindibles o repetitivos. 



Y Acchi Kocchi no es una excepción. Los hechos descritos en la misma se hacen bastante repetitivos, con una dinámica de relaciones de sus personajes totalmente encorsetada. Ahora bien, el anime sabe lidiar con ello bastante bien y lo consigue primero, gracias a lo reducido de su tamaño (apenas 12 capítulos). A pesar de lo recurrente de su contenido no da tiempo a que te hastíe. En segundo lugar es una comedia continua. La comedia suele ser un genero que pese a la falta de profundidad de la obra, es capaz de mantener nuestra atención durante más tiempo. Y tercero y último, explota un sentido del humor y estética algo bizarra (algo) y sobre todo muy moe-adict/neko-obsesion que o bien te atrapa, o bien detestarás. Si eres de los que normalmente maldicen el fanservice y reniegas del moe como un cancer del anime, genero que tanto amas, pero no soportas sus clichés, serás uno de los últimos. Si por el contrario estas herramientas recurrentes del anime, no solo no cuentan con tu animadversión, sino que además los sueles buscar y cumplen su función gracias a la cual te enamoras de sus personajes por su encanto, esta serie será de tu disfrute, pues la principal virtud que tiene la misma es precisamente saber mostrarnos una pareja de tortolitos atolondrados, con cuya torpeza (en especial la de ella) no pararás de reírte, al tiempo que saben crear cierta magia o ternura alrededor de ellos. 
Así pues, fanatizado por los encantos de esta peculiar neko girl y su torpe galán, soportarás sin atisbo alguno de aburrimiento los 12 episodios, que seamos sinceros, además son bastante graciosos.
Y sí, en realidad no pasa nada entre ellos, a pesar de la irritante evidencia, pero reconozcamos que el encanto y gracia de esta serie es simple y sencillamente ver a la torpe y tímida Tsumiki, perdiendo la cabeza con los encantos de Io, encantos que son desplegados de una manera totalmente inocente y sin intención, por parte de este (pues es que simplemente es así). Además, para continuar con la gracia, la desmedida y vergonzosa reacción de Tsumiki será blanco de la atención del resto de sus amigos, incentivando en estos profusas hemorragias nasales (como es el caso de Hime, la victima del moe), o malévolas burlas y juegos (como sucede con Mayoi) que tanta vidilla dan a la serie.



De sus personajes no esperéis una profundidad memorable, son modelos de personalidad totalmente estandarizados y rígidos en toda la serie. Aún así saben crear dos bufones geniales (Mayoi y Sakaki, con los que no pararás de reír con su alocado y desternillante ingenio, así como su habilidad para recibir hostias), un galán misteriosamente encantador a la altura de los grandes de shoujo (Io) y una tierna protagonista que se hace querer. Ya se que muchos de vosotros estaréis diciendo que eso es así porque en realidad soy un adicto a la personalidad tsundere femenina. Bueno, no estoy de acuerdo del todo en que Tsumiki sea una tsundere, más bien es una dandere con ciertas tendencias violentas en especial contra Mayoi. Etiquetas a parte, para mi las tsunderes que gusto suelen ser más emotivas y llenas de energía. Orgullosas y determinadas, chicas con un exceso de sentimientos que no saben canalizar correctamente, siendo contradictorias para evitar que hieran dichos sentimientos. Y sí, Tsumiki tiene algo de todo esto, pero creo que el secreto de su éxito es más la cómica conjunción contradictoria de pequeña pero matona. Es como una mascota adorable, pero con una fuerza casi sobre humana, lo que hace sus explosiones de ira y contradictorias reacciones avergonzadas, algo temible. Que por este carácter, nos la asemejen a un gato continuamente, bueno, solo contribuye a fomentar su aspecto de pet adorable.
Completan el quinteto de personajes principales Hime. Es la típica chica bondadosa e inocente. Pero sus bizarras hemorragias nasales fruto del shock que le produce la contemplación de las continuas escenas moe que protagonizan Io y Tsumiki, es una apreciada fuente de comedia constante. Un gag recurrente, pero con el que me he reído mucho.



En lo referente a su animación Acchi Kocchi es una de esas series que vuelven a demostrarme las virtudes de la animación sencilla. La primera impresión que tienes cuando ves su estilo, sobre todo su estética de personajes, es que debe ser una serie infantil, con uno de los diseños más sencillos y con menos complejidades de la historia del anime. Su diseño moe, no, disculpad .... chibi, adelanta desde el comienzo de la historia, que esta no va a destacar por su dibujo. El problema, o mejor dicho, su virtud, es que no tardas demasiados capítulos en caer presa del encanto de Tsumiki y de Io. La primera acaba siendo la más moe de las tsunderes y el segundo todo un galán.
Además esta monigotización chibi es genial para el sentido del humor que explota la serie. Por lo que su sencillez pronto deja de ser un problema. Es más te gusta, pues casa a la perfección con la historia que nos están contando.
En realidad la serie es relativamente actual (2012) por lo que cuenta con toda una serie de recursos técnicos que le dan la agilidad y rapidez que necesita una serie que se basa en los skechs cómicos, para desarrollar su contenido. Algunas de sus escenas, gracias a esta animación, tendrán un carácter marcadamente bizarro, lo que sin duda suma puntos a su valor cómico.

Su banda sonora cuenta con dos de esos temas, el de apertura y el de cierre, que se hacen querer conforme avanza la serie. Inicialmente los tacharía como canciones frugales, que probablemente me cueste recordar, pero según te encariñas con la serie, pasan a ser afables, en especial el primero. Su título es "Acchi Kocchi de" y esta interpretado por los seiyuus de los 5 personajes principales. De forma similar, "Te o Gyu shite ne" es interpretado por Rumi Oukubo, la seiyuu de Tsumiki.
Pero lo mejor al respecto de la música es encontrarse con hermosos temas instrumentales, tranquilos y muy tiernos, salpicando toda la serie. Es verdad que casi todos son bastante sencillos y discretos, por lo que no los rescataría como una maravilla para mi selección privada, pero hacen que la interacción entre Io y Tsumiki multiplique por cien su moefactor, plagando de tiernas escenas todo el anime, todo el tiempo. De entre ellos destaco de manera particular "Sonna Koto na wa...", aunque en realidad todos ellos son bastante bellos.



¿Es Acchi Kocchi un buen anime? Es muy complicado afirmar que una serie que tan solo busca un entretenimiento ligero, es mejor o peor que otros animes que construyen una única pero compleja historia, que se va desvelando, nos sorprende y además es original. No puedo evitar, de este modo, infravalorar estas series que tan solo buscan la diversión en el gag, sin aportar mucha más profundidad, en comparación con otras obras que además de comedia me dan mucho más. Ahora bien, no puedo negar que Acchi Kocchi, me ha resultado muy amena. Con una comedia reiterada , pero que no llega a agotar. Además, y es la novedad con respecto a otros animes cómicos, acaba teniendo un cierto punto entrañable y tierno. Quizá es la sobrexplotación del moe, quiza sus bellas canciones... el caso es que pese a un rechazo inicial de sus personajes, basándome en la estética tan sencilla y chibi,  al final acabaron por ser apreciados por mi. Sorprendentemente no creo que olvide a Tsumiki, ni tampoco a su protagonista masculino, Io, pues como galán de comedia romántica acaba siendo todo un acierto.
Esta claro que si no os gusta lo moe, la clásica obsesión neko y las bromas y gags algo recurrentes, debéis huir de esta historia. Pero si por el contrario estos factores son de vuestro agrado habitual en cualquier obra, ved Acchi Kocchi, pues de esto hay una verdadera orgía.
Es verdad que la linealidad o cronología en la descripción de las aventuras de los personajes te acaba dando una cierta sensación de historia única en esta serie. No obstante es en realidad un compendio de skech cómicos. Como ya comenté, me resulta muy complicado puntuar este tipo de obra, pues supone una comparación evidente con aquellas que desarrollan una trama o historia única que avanza hasta un desenlace final, que por mis propias preferencias, aprecio mucho más. Aun así a la hora de valorar estas obras, aparte de la comparación con otras, intento responder a la siguiente pregunta ¿consiguió efectivamente lo que creo que la obra pretendía?. Si es así, (como por ejemplo paso con la sorprendente Gekkan Shoujo Nozaki-kun) la puntuación otorgada puede ser bastante elevada. En el caso de Acchi Kocchi me he reído bastante, pero no me ha resultado original y estimo que si hubiese llegado a tener muchos más capítulos, habría llegado a ser repetitiva y aburrida. Por todas estas razones opino que un 7 es una nota demasiado alta para esta obra. A pesar de ello me permitiréis que se la otorgue, pues me confieso devoto del moe y el reiterado humor japones y estos factores desbordan en esta serie. 

Me despido de vosotros dando las gracias a todos los que llegasteis hasta aquí. Espero que la próxima entrada a tratar sea la de una historia algo más profunda, pues reconozco que últimamente me estoy dando un severo atracón de comedias y mucho slice of life y el cuerpo empieza a pedirme argumento más denso. Sayonara queridos amigos nyan!








No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escribe aquí tus comentarios, todos son bienvenidos!